miércoles, 20 de mayo de 2009

¿Qué?

Mirame, escuchame, leeme, escribime.
Primero fueron los ojos, todo lo demás era un caos. Capturar tu mirada, al menos por un minuto, hace que todo sea mucho más fácil, más verdadero. De alguna manera lográs que el mundo deje de girar, simplificás todo, lo hacés más fácil, más concreto. Hay veces que no, que los dos nos enredamos y se nos hace insoportable. Otras, vos no querés servir a mis propósitos y es razonable; me doy cuenta cuanto te absorbo en estas etapas.


Corría en una cárcel oscura y gris, como si fuera de piedra, como una película sobre la segunda guerra mundial: paredes y alambrados, frío y miedo. Me deslizaba por un pasillo sin techo que iba angostándose cada vez más, de manera que en un punto era imposible seguir avanzando. Pensar que el cielo estaba ahí arriba y yo tan inmovilizado acá abajo, tan apretado, agitado y sin aire.

Me desperté con poca fuerza, como si el descanso fuera insuficiente. Me imaginé el suplicio que sería tener que levantarme todos los días para cumplir un horario en una radio, por ejemplo, y no tuviera más opción que levantarme sí o sí para esos noticieros de 6 a 9 de la mañana. Después, al entrar al baño, me cruzo con la mirada de Mateo que sonríe desde su cama; se despertó contento, se desenrieda de las sábanas y dice buen día.

De esa manera comienzo a acomodar todas las cosas que salieron de su lugar durante la noche. A algunas se me ocurre que es mejor dejarlas a la vista, a otras las pateo debajo de la alfombra mientras cierro fuerte los ojos y las narices para alejar todas las sensaciones. Las cosas se iluminan despacio, van ganando cuerpo y se alejan los fantasmas.

No es una cárcel, pienso, son elecciones que cierran algunas posibilidades y abren otras, son caminos. Algunos senderos se angostan y no se puede avanzar más, habrá que buscar otros nuevos para seguir caminando, me convenzo a medias. No se camina para llegar a algún lugar sino para seguir caminando, para avanzar, para no dejarse caer, para no caerse y dejar, de esto sí estoy seguro.

1 comentario:

  1. Me quedo con:
    " No es una cárcel, pienso, son elecciones que cierran algunas posibilidades y abren otras, son caminos. Algunos senderos se angostan y no se puede avanzar más, habrá que buscar otros nuevos para seguir caminando, me convenzo a medias"
    al menos la posibilidad de la escritura y del pensamiento permiten avanzar sin límites por esos senderos y no acomodar nada de lo que se sale de lugar durante la noche, aunque también me convenzo a medias.
    Terminé parafraseándote, señal que no hay nada que agregar a lo dicho. Jaque.-

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